Llevo días sin dibujar y acordándome de ti. Tanta ansia por volver y me amordaza el bloqueo. ¿Cómo es posible encerrar el silencio en mi cabeza? Me persiguen las horas. El reloj imaginario que tiñe la paciencia va más deprisa que yo. Debería volver al papel, a tachar, a pensar, pero la prisa me apremia y, aunque no diga nada, las voces vuelven a ocupar su sitio. Es probable que alguién lo entienda... Quizás si esto lo escribiera P. B. tendría más sentido.
Espacio, lugar, sitio, hueco donde juntar las letras que no digo en voz alta, donde juntar las letras que al final del día me faltaron por decir, donde juntar las letras que ocupen el rincón que me faltó llenar.... vuelvo al blog con ilustraciones y textos nuevos, vuelvo al blog porque lo echo de menos, vuelvo al blog porque, aunque parezca que hablo sola, lo hago con mucha gente, vuelvo para hacer ruido en silencio. Bienvenida yo de nuevo a mi espacio de liberación mental.